Recibimos de nuestros padres toda la información genética. A partir de ahí, se configura un código que es el que tendremos durante toda la vida. No obstante, el error es pensar que esta secuencia siempre se mantiene igual. Lo cierto es que no es así y el epigenoma puede cambiar. Este es el motivo por el que la epigenética ha ganado importancia en los últimos años. Explicamos, brevemente, qué te puede aportar esta disciplina para tu crecimiento personal.
Herencia genética
Cuando se fecunda un óvulo, se mezcla la información genética de ambos progenitores. Excepto en casos muy concretos (quimerismo), el nuevo ser humano tiene una información única e irrepetible. Indudablemente, este factor ya es de por sí lo suficientemente importante como para entender la similitud de caracteres físicos. Sin embargo, aunque ese hecho está aceptado y demostrado científicamente, hay otros aspectos que se quedan dentro de lo interpretable.
En la Biblia ya se hacía referencia a las consecuencias en los hijos de los hábitos de los padres, aunque quizás el principal paso se dio con el nacimiento del psicoanálisis. Es aquí donde la epigenética puede dar respuesta a alguna de las preguntas que nos hacemos.
Entender la epigenética
En este caso, lo que nos interesa entender de la epigenética es que se refiere a la relación de los genes con el ambiente y, en consecuencia, con su actividad. Es evidente que la secuencia del ADN va a ser la misma, pero no el ritmo.
Por lo tanto, esto significa que hay un elemento directamente relacionado con el entorno en el que vivimos. No solo nuestros padres, sino nuestras relaciones, el clima e incluso nuestros hábitos influirán en la configuración. Un aspecto no muy conocido es que esta configuración puede modificarse a lo largo de la vida. Lo que sucede fuera es fundamental para entender las reacciones que tiene nuestro organismo.
En consecuencia, si bien hay un caudal genético que procede de nuestros progenitores, hay otra parte que cambia con el entorno. Saber esto es importante para entender que nosotros tenemos el poder de cambiarlo. O, dicho de otra manera, los hábitos saludables y las relaciones sanas influirán en los mecanismos epigenéticos, que variarán. Dicho de otra manera, el ADN, cambia a lo largo de nuestra vida, aunque no lo parezca.
Es importante tener en cuenta que esta variación puede ser a mejor o a peor. Algo que sucede habitualmente es que la persona, después de pasar por una enfermedad o proceso traumático, ve modificados los mecanismos. En consecuencia, es fundamental que sepas que esto sucede para poder anticiparte a determinadas dinámicas.
Conclusión
La epigenética es una disciplina a la que hay que dar importancia porque determina gran parte de los procesos humanos. Si asumimos el principio general de mens sana in corpore sano, habremos avanzado mucho. En Emocodificación y Sanación Genética te ayudamos en el proceso de sanación para que mejores tu calidad de vida. Contacta con nosotros y te informaremos con más detalle de las opciones a tu alcance.
Felix
19/08/2018Hola xabier gusto contactarte, que interesante este tema de la epigenetica, estoy muy interesado en conocer con mas detalles las opciones q tengo a mi alcance para saber como sanar muchas gracias por esta orientacion
Xabier Grandio
26/08/2018Buenas tardes:
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